De la pluma de Andrés Hurtado VP LATAM de Nutanix, un texto que nos hace ver la importancia y el avance de las soluciones de Nube Híbrida intengrando la ciberseguridad.

Las cifras son abrumadoras: una encuesta realizada por Nutanix a 1.450 responsables de TI ha revelado que el 93% de los encuestados afirma que su organización necesita estar mejor preparada contra el ransomware y el malware.

En otras palabras, la gran mayoría de las empresas piensan que van un paso por detrás de las ciberamenazas.

La adopción de un modelo multicloud es un excelente primer paso en este sentido. Según nuestro Enterprise Cloud Index, la perspectiva predominante es que ocho de cada diez organizaciones de todo el mundo ya han adoptado este modelo.

¿Cómo se relaciona esta decisión con una mayor protección contra los ataques? Por un lado, aunque sigue existiendo la falsa percepción de que la nube pública es menos segura que la privada, la evidencia sugiere que los principales proveedores de nubes han tomado medidas significativas para garantizar la seguridad de sus modelos híbridos multicloud, mucho más allá de sus propias nubes.

Sin embargo, la ciberseguridad y la seguridad física también se están fusionando con la adopción de innovaciones basadas en la nube. Para los profesionales de la seguridad, esto significa que su conjunto de capacidades se amplía ahora para incluir tanto la seguridad física como la digital.

Esto les permite obtener información sobre la automatización, la integración y los sistemas de seguridad híbridos; mantenerse al día con las cambiantes demandas de seguridad; adoptar las mejores prácticas; e incluso resolver posibles incidentes.

Soluciones como Nutanix Flow Network Security ofrecen seguridad avanzada para las aplicaciones y datos críticos de su organización. En tiempos en los que los ciberataques son cada vez más sofisticados, esta herramienta establece una base de defensa en profundidad para ayudarle a crear una base sólida como una roca ante un panorama de amenazas en constante cambio.

También acelera la implantación de una estrategia de confianza cero (zero trust), esencial en estos tiempos en los que los usuarios necesitan acceder en cualquier momento, desde cualquier lugar y en cualquier dispositivo.

Establece que el acceso a los sistemas corporativos, ya sea desde dentro o desde fuera de la red, debe ser autenticado. Por tanto, se limita el acceso implícito a aplicaciones y datos.

También incorpora la automatización para eliminar los errores humanos, sobre todo cuando se trata de cuestiones de cumplimiento normativo. Y lo que es más importante, también ayuda a las organizaciones a integrar todo su panorama de seguridad, simplificando la gestión de entornos tan variados y diversos.
En un contexto en el que la cuestión no es si la organización va a sufrir un ciberataque, sino cuándo y con qué frecuencia, la preparación es una de las principales prioridades de las organizaciones.

Los entornos multicloud, en combinación con las herramientas adecuadas, pueden ser la clave para una mayor tranquilidad.

Artículo original dando clic aquí